Javier Cantera: "Los empresarios tienen un compromiso con la sociedad"

Javier Cantera palentino, piscólogo y presidente del grupo BLC comenzó con una sentencia: “yo no soy emprendedor”. “Intentamos evitar al palabra empresario. Tengo 22 empresas en este momento y entre ellas, una dedicada a ayudar a los emprendedores. En los últimos años “hemos conseguido15 nuevos empresarios y es de lo que más orgulloso me siento” y por eso está en el e-Coned.

“Nadie nace empresario pero todos tenemos la capacidad de llegar a serlo”, sentencia y prosigue con lo que él llama: “la bendita crisis” porque, entre otras cosas ha provocado la movilidad de las personas. “Yo tenía un amigo que era de Burgos, y me envió el currículum de su hija y ponía movilidad: incluso Burgos”

Jugando con el título de su charla durante toda su exposición, Javier Cantera ha insistido en la necesidad de adquirir conocimientos en el mundo en el que vivimos.“Lo más importante para emprender es aprender”. Y “fracasar es una de las mejores maneras para aprender. Muchas veces intentamos magnificar los currículums hichándolos pero aprendemos de los errores”., explica.

Siguendo con los juegos de palabras acuña el término “eprendizaje” que define como “la capacidad que tenemos de que para emprender hay que aprender y para aprender hay que tener la actitud de emprender.” y añade: “mi mujer y yo somos psicólogos y todos los días preguntamos a nuestros hijos que han aprendido”.

Javier Cantera ha defendido durante toda su charla el papel del empresario y esa manía de confundirdir al emprendedor con un jovencito con una idea. “Tenemos una responsabilidad económica pero esa no es tan importante como la social. Por eso reivindico la palabra empresario. También una responsabilidad revolucionaria que apuesta por el conocimiento y las nuevas ideas.”, sentencia.

Para que alguien llegue a crear su propia empresa debe superar diferentes fases estandarizado en el modelo erpa. lo primero que miras es su actitud, es fundamental que se aborden los temas emocionales, “hay emprendedores que se les iluminan los ojos cuando hablan, pero de ahí pasamos inmediatamente a la racionalización aunque compremos el sentimiento. Lo primero es que la gente cuente en un discurso su emoción y después llegan los procesos que esdonde fracasan la mayoría de lo emprendedores”. Lo último es la automatización, el desarrollo.” Y pone un gran ejemplo de su grupo, el caso de de un señor que tiene 65 años “para nosotros es un orgullo que alguien en su segunda vida profesional llegue a emprender”.

Javier Cantera, explica también un concepto no muy conocido el de los emprendedores internos, aquellos que llegan a las empresas para convulsionar su cultura. “La gente tiene que crear una empresa para crear una cultura.” y destaca el miedo al fracaso en España. “El error está permitido en la cultura norteamericana” Cuando había una reclamación se ponían contentos porque eso les obligaba a reinventarse.

La crisis también ha tenido su espacio durante la ponencia pero ni mucho menos ha sido para lamentarse. “En época de crisis lo primero es superar el duelo. Llorado se viene de casa”. Y señala que “la crisis se acabará.” Uno de los puntos importantes que hay que tener claro es que “cuando cambiamos la forma de aprender adquirimos nuevos conocimientos. El 80% del éxito de la empresa está en los comos.” La crisis es un factor externo, no se puede llevar dentro.

Para que la gente posicione su empresa tenemos cuatro bases, la primera es la diversificación, el segundo son los llamdos “océanos azules”. “Dicen que todas las empresas tiene uno y yo creo que todos lo tenemos”. En tercer lugar está la innovación dentro del mercado habitual pero con nuevos proyectos y al final está lo nuevo al 100%. “Nosotros explicamos en que lado está y dónde se puede desarrollar. Para eso hay que gestionar la confianza.

Hay que centrarse en lo global, no solo en las cifras, ir más allá de la demanda existente, desarrollar un modelo de negocio propio y superar los obstáculos de la organización e incorporar la ejecución a la estrategia. “Se hace la estrategia equivocándote, aunque haya que tener un plan de partida”. Recalca Javier Cantera.

Javier Cantera habla de Leonardo Da Vinci y aplica las características que el humanista aplicaba a los artistas a los empresrios de hoy en día. “Lo primero que tiene que ser es curioso, tener inquietud por aprender porque el ritmo de aprendizaje ahora no es el mismo que hace años”, y pone el ejemplo de su abuelo, pastor palentino. Los segundo es aprender del error. “En EE UU ningún emprendedor es bueno si no ha fracasado tres veces”, el siguiente es el refinamiento emocional y el cuarto la tolerancia a la incertidumbre a la ambigüedad de un emprendedor debe ser mucho mayor, también debe ser capaz de aunar el arte y la ciencia, como es el trabajar que hace falta talento e inversión en tiempo un equilibrio de intereses. Si esto se desarrolla dentro de los emprendedores conseguirá ser empresario.

Cantera advierte de los peligros a los que se tendrá que enfrenter el empesario que comienza, como los “doctor no” pero hay otros modelos: el pasivo, el conservador, el apático, que señala siempre los fallos de otros . “Ser emprendedor es una actitud vital” concluye, pero sigue con más modelos de personas que ponen trabas a los nuevos negocio, esiste el que siempre se pierde en los detalles, el que tirabalones fuera, posterga siempre la acción y nunca hacen lo que han prometido, el negocioador que siempre se resiste buscando algo que ganar, el llorón, elque hace chantaje psicólogo, el planteador, que te puede quitar tu propia idea.

Pero no solo se tendrá que enfrentar a este tipo de personajes sino también a una serie de frases asesinas que escuchará una y otra vez “No va a funcionar, no hay presupuesto, demasiado moderna demasiado antigua, no es nuestro problema... y, la más habitual en los últimos tiempos: con la que está cayendo.

Como contrapunto se encontrará con las frases suicidas: esto puede no ser aplicable, pude parecer excéntrico, este no es el momento, puede que sea muy caro, quizá se rían... “este último es el miedo al ridículo, tan español, debido a la estructura religiosa del país.” E insiste: “No hace falta airear los fracasos pero tampoco ocultarlo.

Cantera quiso terminar con la frase del poeta Antonio Machado, alguien a quién él considera un visionario: “Solo un necio confunde valor y precio”.